Las agencias de comunicación también pueden contribuir al cuidado del medio ambiente. Cualquier empresa puede aportar su gota de agua en el océano de iniciativas ecológicas, ahora que se lleva tanto eso de la responsabilidad social corporativa y la sostenibilidad. Se puede predicar con el ejemplo e intentar que la actividad de un negocio, en su día a día, contribuya a reducir la huella de carbono, por ejemplo mediante la compra de productos en lugares cercanos a su ubicación. Además, podemos consumir preferentemente productos ecológico o de comercio justo.
Las energéticas ofrecen también la opción de cambiar a un contrato de energía verde… quizá el nuevo año esté lleno de oportunidades para adoptar un enfoque más sostenible relacionado con nuestra actividad profesional.
Evitar el transporte privado, utilizar videoconferencias en lugar de reuniones presenciales y continuar con la práctica de reutilizar el papel y reciclar el que se genere como desperdicio. Los ejemplos nos rodean.
Es nuestra responsabilidad que las próximas generaciones conozcan el planeta como nos lo legaron a nosotros. Y también está en nuestra mano compatibilizar el desarrollo tecnológico y el respeto por el medio ambiente. ¿También te animas?