El Hospital Sant Joan Despí Moisès Broggi, centro perteneciente al Consorci Sanitari Integral, ha incorporado tecnología VDI (Virtual Desktop Infrastructure) de Citrix para conseguir crear un hospital sin papeles.
La empresa adjudicataria del proyecto fue la consultora e integradora Ozona Consulting, que ya había trabajado anteriormente con el Consorci. Ozona se ha encargado de la puesta en marcha de un proyecto de implantación de 1000 puestos que concluyó en un tiempo récord de seis semanas.
Este proyecto se ha realizado con el objetivo de ofrecer a los pacientes mejoras en la calidad asistencial, y a los profesionales del centro accesibilidad y veracidad de la información disponible en todo momento.
Las principales razones que llevan al Consorci Sanitari Integral a emprender, para el Hospital de Sant Joan Despí, un proyecto de virtualización de escritorios fueron: reducir el tiempo que se tarda en instalar un PC y en actualizar una aplicación en todo el parque de ordenadores; atender la criticidad de los puestos (no sólo de los servidores, también de los equipos personales); disminuir los recursos técnicos dedicados al soporte de PCs (el ratio de PCs por técnico cada vez es mayor, y los usuarios cada vez esperan más valor añadido del Departamento de TI) y, finalmente, garantizar al usuario el acceso (a datos y aplicaciones) y la movilidad (dentro del centro y entre los distintos centros del Consorci).
Este centro, inaugurado en 2010, dispone de las últimas tecnologías y tiene como finalidad mejorar la asistencia sanitaria en el Baix Llobregat a más de 300.000 usuarios. Pertenece al Consorci Sanitari Integral (provincia de Barcelona), una entidad que engloba más de nueve centros asistenciales sanitarios y sociales entre hospitales de agudos, centros de asistencia primaria, residencias, centros de rehabilitación y un hospital sociosanitario.
“Siempre he pensado que todos los servicios de acceso de los usuarios son la parte más delicada a implementar, dado que afectan de forma muy directa al trabajo diario de éstos, con lo que no sólo han de funcionar, sino que también han de ser respetuosos con las distintas formas de trabajar de los usuarios. El hecho de que Ozona fuera la empresa adjudicataria del proyecto nos dio mucha seguridad. Durante la implementación del proyecto y una vez arrancado, estuvieron siempre a nuestro lado”, explica Josep Llauradó, Jefe de sistemas del Consorci Sanitari Integral.
El proyecto, que se dividió en función de la tecnología, comienza con un piloto a 70 usuarios de XenApp con Thinclients, tecnología que ya conocían, luego con Provisioning y, finalmente, Xen Desktop. Lo más complicado – teniendo en cuenta la cantidad de equipamientos que había que incorporar – fue organizar a los distintos proveedores para que pudieran trabajar sin demoras. Además, se hizo un importante esfuerzo en formación.
A la hora de enumerar los beneficios también deberíamos hablar cualitativamente de las mejoras para profesionales y pacientes a nivel asistencial, accesibilidad y disponibilidad de información, entre otras.